Ningún familiar de los menores se ha puesto en contacto con la Consejería para pedir su tutela; esta sigue buscando posibles allegados dentro y fuera de nuestras fronteras

El Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo ha ratificado este miércoles la prisión provisional comunicada y sin fianza para el matrimonio detenido el pasado 28 de abril por mantener presuntamente encerrados a sus tres hijos menores en una vivienda de la parroquia ovetense de Fitoria desde el año 2021. Una decisión judicial que se ha adoptado tras la comparecencia del matrimonio, que declaró por videoconferencia desde el Centro Penitenciario de Asturias. El caso se encuentra actualmente bajo la instrucción del Juzgado número 2, tras la inhibición del número 3, que fue el órgano judicial que inicialmente ordenó su ingreso en prisión. La magistrada ha considerado que no han variado las circunstancias que motivaron aquella decisión, valorando el riesgo de fuga por la falta de arraigo en España de los investigados, un ciudadano alemán de 53 años y una ciudadana estadounidense de 48, la necesidad de protección a las víctimas y la posibilidad de reiteración delictiva. El Ministerio Fiscal ha respaldado esta medida, que se mantiene mientras avanza la instrucción. La causa sigue abierta por presuntos delitos de abandono de menores, maltrato psicológico habitual y detención ilegal.
Los hechos salieron a la luz tras una denuncia vecinal que alertó a la Policía Local de Oviedo de la posible situación irregular en la vivienda. Según fuentes municipales, una vecina había manifestado sospechas al observar que nadie salía de la casa, que permanecía con las persianas bajadas, sin signos de actividad habitual y sin que se viera a los menores acudir a la escuela. A raíz de esta denuncia, el 14 de abril se inició una investigación con vigilancia del domicilio, que culminó con la intervención de los servicios sociales y los agentes, autorizados por la letrada del menor.
«Ningún familiar se ha puesto en contacto para hacerse cargo de ellos»
En el momento del rescate, la mujer reconoció que los menores no salían de la vivienda desde 2021, justificando esta decisión por razones de protección y salud. La inspección del inmueble reveló condiciones insalubres, con acumulación de basura, presencia de animales enfermos, excrementos, medicamentos y objetos personales infantiles, incluyendo cunas, en las que los tres menores habrían realizado diversos dibujos. Los tres niños, dos de ellos gemelos de ocho años y el tercero de diez, fueron trasladados al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) para su valoración médica y posteriormente quedaron bajo la tutela del Principado en un centro de menores de Oviedo.
La Consejería de Derechos Sociales y Bienestar del Principado de Asturias ha asumido la custodia de los menores y ha anunciado que se personará en la causa penal. La titular del departamento, Marta del Arco, indicó hace varios días que «ningún familiar de los menores se ha puesto en contacto para hacerse cargo de ellos», y ha añadido que se está trabajando en colaboración con instituciones internacionales para determinar si los niños tienen parientes en otros países, como Alemania.
Durante los cuatro años que presuntamente duró el encierro, no constaban registros de escolarización ni movimientos visibles desde el exterior. La comida se recibía mediante repartos a domicilio, siendo el padre el único que abría la puerta para recoger los pedidos. Según los investigadores, este fue el único momento en que se le pudo observar antes de la intervención policial. La mujer, tanto en el momento de la detención como en su traslado judicial, fue vista portando una mascarilla, aunque no consta que exista una causa médica que lo justifique.