La oposición considera excesiva la altura de las torres previstas y pide más espacios abiertos, viviendas para alquiler asequible y equipamientos para el barrio

El Pleno ordinario del Ayuntamiento de Oviedo aprobará este miércoles, con los votos del PP y la muy probable abstención de todos los grupos de la oposición, el Plan Especial para la parcela del antiguo instituto de San Lázaro que incluye la construcción de dos torres de viviendas, con 22 y 15 pisos de altura. Se trata de una actuación que todos los partidos consideran necesaria para la regeneración de la zona, pero cuya concreción sobre los planos genera rechazo en la forma y en el fondo entre la oposición.
El proyecto contempla la construcción de dos torres diseñadas por el arquitecto Patxi Mangado. Una, con 22 plantas, alcanzará los 74 metros de altura, mientras que la otra contará con 15 pisos y llegará a los 46 metros. Con una estructura que se estrecha en altura y un diseño en el que predominará el vidrio en los pisos superiores, el conjunto busca modernizar el entorno. Además, el resto del solar, de 5.000 metros cuadrados, se destinará a uso público, con una glorieta que mejorará la conexión entre Santiago de la Manjoya y San Esteban de las Cruces.
En el pleno del pasado mes de febrero, el concejal de Infraestructuras, Ignacio Cuesta, defendió el Plan Especial para San Lázaro afirmando que “es un gran proyecto de transformación urbana, de regeneración y revitalización de un barrio que va a generar espacios que en la actualidad no existen. Donde la movilidad ha sido estudiada de una manera muy exhaustiva, donde se van a generar nuevas zonas comerciales, que faltan también en ese barrio y donde, además los aprovechamientos que reciba el Ayuntamiento se van a transformar en equipamientos públicos al servicio de todos los vecinos de esa zona”.
En cuanto a la altura de las torres, Cuesta indicó que las edificaciones en altura “son una tendencia del urbanismo moderno…porque consumen mucho menos suelo urbano” que es limitado y agregó que las torres se llevarán a cabo “en las condiciones que marca la normativa” en materia de seguridad y eficiencia, al tiempo que “se enmarcan en proyectos que desarrollen profesionales de reconocido prestigio, como es este caso, y se transforman en palancas de revitalización enormemente atractivas” para las zonas donde se ubican.
Desde el Ayuntamiento destacan que esta intervención no solo transformará la imagen del barrio, sino que también aportará nuevos espacios urbanos y dinamismo a la zona. Además, la cesión de suelo para un equipamiento municipal busca reforzar los servicios públicos y mejorar la vida de los vecinos.
Desde el PSOE, su concejal Juan Álvarez recordó que la actuación afecta a “un terreno de titularidad pública y que se enajenó para dárselo al sector privado a cambio de unos derechos edificatorios; pero esa es la situación actual que tenemos que lidiar, esos son derechos consolidados en el Plan General”. Tras señalar que “estamos de acuerdo en que no se monetaricen las cesiones obligadas y que se creen equipamientos para el barrio”, añadió que “la vivienda protegida debería ser para el alquiler asequible, pero esto no sería ninguna cesión del equipo de gobierno, simplemente el desarrollo de lo estrictamente legal”.
El socialista añadió que “no compartimos el diseño que se propone, nos preocupa su impacto sobre el barrio, pero esto no es un pelotazo, hay la misma edificabilidad que había. No sucede lo mismo en otras actuaciones, que todavía estamos en condiciones de parar como la de la Fábrica de Gas en la que sí se pretende doblar la edificabilidad actual por unos supuestos sobrecostes y, además, de una manera completamente descontextualizada y destruyendo un valor patrimonial de primer orden”. En el caso de San Lázaro, dijo, “estamos hablando simplemente de redistribución de una determinada volumetría” y confió que lo que se proyecte se haga de una manera “mucho más amable”.
El portavoz de IU Convocatoria x Oviedo, Gaspar Llamazares, señaló que “nuestro grupo municipal no puede votar favorablemente, porque esta propuesta que se nos hace en el Plan Especial, que significa transformar un terreno público en un bien privado”, A su juicio, “probablemente estemos ante una propuesta de segregación del barrio, con un modelo de vivienda que tiene poco que ver con el modelo de vivienda del barrio. Y que, además, se da en un barrio donde hay un déficit de equipamientos y de servicios”.
IU Convocatoria cree que “no solamente hay que reconsiderar el volumen del edificio, la disposición del edificio, las zonas verdes, sino que hay que reconsiderar también claramente las cesiones”. El grupo pide edificios de seis plantas, un 20% de vivienda pública y un centro municipal para el barrio.
Por su parte, la portavoz de Vox en el Ayuntamiento, Sonsoles Peralta, manifestó en el último plano municipal que “el equipo de gobierno sigue improvisando con modificaciones puntuales y planes especiales que, en muchos casos, dificultan el desarrollo ordenado de la ciudad y comprometen su futuro. Y el Plan Especial de San Lázaro es un ejemplo de esta falta de visión. Lo que se plantean son dos torres, de 20 viviendas, que a nuestro parecer no se integran demasiado bien con el entorno. Además, un ámbito en el que, seguramente, parte de las dotaciones de espacios libres, creemos, serán para uso y disfrute exclusivo de las personas que residan ahí”
Desde Vox señalan que el documento que se aprobará el próximo miércoles sigue “priorizando el máximo aprovechamiento urbanístico en detrimento del bienestar de los ciudadanos” y recuerdan que se prevén torres de hasta 22 plantas “en un entorno donde las edificaciones colindantes no superan las seis alturas”.
Peralta denunció el pasado viernes en una nota de prensa que “amparados en la normativa vigente duplican los más de 24.000 metros cuadrados construibles permitidos para rentabilizar un negocio privado”, añadiendo que “la cesión del suelo público prevista de apenas 1.530 metros cuadrados se destina en su mayor parte a viales, accesos y escaleras de hormigón vinculadas al centro comercial dejando un mínimo de zona verde”.
La portavoz de Vox entiende que “nos venden mejoras en accesibilidad y espacios peatonales cuando en realidad los vecinos solo podrán disfrutar de una mínima franja de esparcimiento”.